domingo, 12 de julio de 2009

El Violín/ Capítulo I: Una y otra vez.

A Katherin, que le gustan las historias de amor….
Luego…A ti…. Que te quiero tanto.




El Violín



CAPITULO I: Una y otra vez

Caía el día. Miré por la ventana de la estancia, que no era mía. Alguien había teñido el cielo de carmesí justo para combinarlo con el color artificial de mis labios que se tensaron cuando mis pensamientos quedaron interrumpidos por aquel…sonido.

Aquel sonido… que penetraba en mi piel por los poros y seguido tenia ese efecto tan típico, tan común, pero impactante. Ese sensual frío de unas manos invisibles recorriendo mi espalda. Cerré los ojos. Pensé. Aquí vamos otra vez.

Aun conociendo mi fatum, no podía cambiarlo. La verdad, no quería cambiarlo.

En los últimos años se había intensificado, aquel estúpido deseo de acercarme mas a el, lo deseaba, lo necesitaba. Yo sabia que algo malo resultaría de aquello, pero tenia el incontrolable deseo suicida de abrazar mi destino.

Y en mi caso…. De hacer mas que el amor con el.

Así que, como poeta que no puede resistirse a su musa fui al encuentro con la música. Desee arrancar cada una de las cuerdas de aquel instrumento y cortar con ellas mi cuerpo, con el único fin de absorber las notas que de ellas venían, todo esto mientras me movía (con mi peculiar estilo al caminar) hacia la estancia al final del pasillo.

Una última nube suspiró y se fue a dormir. Entró la noche, despojada de nimbos y con la única compañía de una luna solitaria y una estrella cercana. ¿Venus?... Mientras, yo abría las puertas sin tocar ni pedir permiso. Un paso dentro del cuarto y la música del violín se detuvo. Mi cuerpo se estremeció, solo yo debí notarlo.

“¿Amor?” preguntó él como si no supiera que era yo. Cerré los ojos en un parpadeo lento y mi corazón pegó fuerte en el pecho cálmate ya, solo es un hombre ni que fuera el dios adonis, pensé. Suspiré con fuerza y enojada.

“Aimee, ese es mi nombre.” Me limite a responder, la rabia no me daba para mas.

“Entonces, Aimee –Si que sonaba dulce cuando lo pronunciaban sus labios y hasta llegaba a agradarme mi propio nombre—te gusta la música, no?”

“No, en realidad me preguntaba si podrías dejar mis oídos descansar por un momento. Estoy..Agotada.. y necesito dormir”

“Pues… No escuches” Me respondió el hombre de ojos profundos y de un color café oscuro, al menos de ese color estaban aquella noche de verano. “¿Algo mas?”

Guardé silencio. Mi corazón intentaba destapar alguna excusa para quedarse, aun así fuese en silencio, solo para alimentarse de su respiración. De su presencia.

“Yo… Buenas noches” concluí bruscamente y de igual forma di media vuelta haciendo ondular mi vestido casual pero unas manos desconocidas tocaron mi brazo por primera vez en tres años.

“¿No te quedas?, ¿Te necesita él mas que yo esta noche?” susurró en mis labios después de forzarme a deshacer mi pasada media vuelta. Cerré los ojos nuevamente y sentí que perdía las fuerzas, mi espíritu desmayaba ante aquel perfume, mezcla de su olor natural y el aroma del jardín de las rosas sin color.

“No puedo esta noche” logré decir luego de un vago intento por respirar sin agitarme.

“¿Entonces a qué viniste? ¿A exhibir tu figura de mujer inalcanzable?”

“Eres un patán, ¿lo sabias?” le dije, sintiendo como el calor del enojo volvía a mis venas. “Vine por el violín”

“Lo sé. No puedes resistirte. Es una pasión que compartimos, amor”

Inhalé. Exhalé.

“No puedes resistirte a mi” sentenció. Y tú, ¿qué cosa tan importante te has creído?, he de admitir que en mis pensamientos no hay palabras rebuscadas.

Fue un impulso. Algo que solo…Sucedió y que en los próximos minutos seria sujeto de mi arrepentimiento. Le propiné tremenda bofetada. Sonreí y Salí lo mas rápido que mis tacones blancos me permitieron, mejor rápido antes de que ese engreído decidiera detenerme otra vez.



Mientras escribia mi playlist es: Bocatabu- Bang Bang. La repetí una y otra vez;
Aclarando: Cualquier error es justificable: deben ser alrededor de las dos am;
los pensamientos estan en cursiva y los dialogos entre comillas;
escrito en primera persona;
entiendase, no soy yo.



3 comentarios:

Anónimo dijo...

lokiiitaaaaaaaaaa!!!!
thx por pensar en miiii.......claro bruja k acertaste me gusto mucho lo k acabas de postear :)
estoii ansiiosa de leer lo k sigue
obvio si necesitas cualkiier inspiracion solo tu sabes donde encontrarme

x o x o
ur BFE
kAthY

JGacias dijo...

"claro bruja k acertaste me gusto mucho lo k acabas de postear
estoii ansiiosa de leer lo k sigue"

Sentimiento compartido. Excepto por lo de bruja. Creo que voy a cambiar de instrumento para mi próximo cuento.

SILENCIO CRONICO dijo...

He leído tu historia por recomendación de un amigo (Mihail Garcia) y como otros he quedado envuelto en ella,
Espero con ansias una próxima parte y las que han de seguir si es el caso,
Me encanta tu pequeña historia (el violín).